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Nevera de viaje para leche materna
Si vas a hacer un viaje mientras te extraes leche exclusivamente, ¡vas a viajar con leche materna! A continuación, he expuesto todo lo que debes tener en cuenta para viajar con leche materna, tanto si vas en coche como en avión a tu destino, y si viajas con leche materna congelada o fresca.
Si te estás extrayendo leche exclusivamente, la mayor parte de lo que alimentes a tu bebé será la leche que te extraigas durante el viaje, pero no es mala idea llevar también un poco de leche extra, por si se produce un derrame u otro percance. A continuación te explicamos cómo llevarla.
Si quieres, puedes controlar la temperatura de la nevera con un termómetro como éste (te indica si la nevera está en la “zona de refrigeración” o en la “zona de congelación”). Recuerda que si abres la nevera aumentará la temperatura en su interior, por lo que no debes abrirla constantemente.
Lo bueno de volar es que la mayoría de las compañías aéreas consideran que el sacaleches es un “dispositivo médico” y, por lo tanto, no lo cuentan como equipaje de mano, así que puedes hacer la maleta como lo harías normalmente. (Quizá quieras llamar antes para confirmar que éste es el caso de tu compañía aérea).
Bolsa de transporte de leche materna
Tanto si se va de la ciudad durante una semana, como si visita a sus familiares o se traslada a un nuevo lugar, esta guía para viajar con la leche materna le ayudará a llegar a donde tenga que ir junto con su sacaleches, sus piezas y, lo que es más importante, ese preciado oro líquido. Además de tomar precauciones de seguridad adicionales, como llevar una mascarilla cuando esté rodeada de otras personas, llevar un desinfectante de manos adicional y, en algunos casos, autodesinfectarse cuando llegue, asegúrese de planificar también el transporte seguro de la leche materna. Almacenar la leche materna es todo un arte: hay que protegerla durante el transporte y almacenarla adecuadamente en todo momento. Además, si tienes que viajar en avión, tienes que asegurarte de conocer y cumplir todas las directrices de la TSA sobre la leche materna para evitar retrasos innecesarios. Aquí tienes una guía completa para transportar y viajar con leche materna para que puedas llegar a donde necesites.
Cuando se trata de viajar con leche materna congelada, ya sea en avión, en coche o en tren, asegúrate de tener los recipientes de almacenamiento adecuados para que dure el viaje. Después de todo, no hay nada peor que descubrir que tu leche materna, cuidadosamente extraída, se ha filtrado por todas partes.
Extracción de leche materna
Hable con su enfermera especializada en salud infantil, con un asesor de lactancia o con un consejero de la Asociación Australiana de Lactancia Materna para obtener más información sobre la extracción, el almacenamiento, la limpieza del equipo, el transporte y la preparación de la leche materna extraída para su bebé.
Algunas madres se extraen grandes volúmenes cada pocas horas, mientras que a otras les resulta más fácil extraerse pequeñas cantidades con más frecuencia. Otras madres prefieren extraerse la leche. Esto es cuando se extrae varias veces en un periodo de 2 a 3 horas.
Extraer más a menudo (frecuencia) puede aumentar el volumen de leche mejor que pasar más tiempo (duración) extrayendo en cada sesión. Elija una pauta de extracción que le convenga, y siga extrayendo durante unos minutos después de que el flujo de leche haya cesado.
Esta publicación se ofrece únicamente con fines educativos e informativos. No sustituye a la atención médica profesional. La información sobre una terapia, un servicio, un producto o un tratamiento no implica su aprobación y no pretende sustituir el consejo de su profesional sanitario. Los lectores deben tener en cuenta que, con el tiempo, la actualidad y la exhaustividad de la información pueden cambiar. Todos los usuarios deben solicitar el asesoramiento de un profesional sanitario cualificado para obtener un diagnóstico y respuestas a sus preguntas médicas.
Cómo transportar la leche materna cuando está fuera
Hay muchos factores que pueden afectar al tiempo de conservación de la leche materna en distintos lugares, como la temperatura de almacenamiento, las fluctuaciones de temperatura y la limpieza al extraer y manipular la leche materna. Estos factores hacen que sea difícil recomendar tiempos exactos de almacenamiento de la leche materna en distintos lugares.
Si vives en un clima más cálido o mantienes tu casa a una temperatura más cálida, debes colocar la leche materna en el refrigerador si no la vas a utilizar en pocas horas. La leche materna no se estropea tan rápidamente a temperaturas más frías.
Si el bebé no se ha terminado el biberón, la leche materna sobrante se puede utilizar en las dos horas siguientes a la finalización de la toma. Después de 2 horas, la leche materna sobrante debe desecharse. Para evitar el desperdicio de la leche no consumida, considere la posibilidad de almacenar, descongelar y calentar la leche en cantidades más pequeñas.
Su refrigerador debe estar a 40°F o menos, y su congelador debe estar a 0°F o menos. Si los termostatos de su frigorífico/congelador no indican las temperaturas, utilice termómetros de electrodomésticos baratos-icono externo. Incluso si su refrigerador/congelador muestra las temperaturas, los termómetros para electrodomésticos pueden ser importantes si se pierde el suministro eléctrico o tiene problemas mecánicos.
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