Posiciones quirurgicas mas frecuentes

Lista de posiciones quirúrgicas

Hace tiempo que no publicamos nuevos contenidos en la aplicación Touch Surgery™, y relanzamos estos blogs con nuestra última simulación que demuestra cómo garantizar el cumplimiento de la posición segura y eficaz del paciente. Esta simulación proporciona los pasos clave para el posicionamiento en posición supina, prona, lateral, litotomía, sentado, Trendelenburg y Trendelenburg inverso. Así como la gestión de los riesgos asociados a la posición, por ejemplo, la seguridad de los tejidos blandos y la neurovasculatura en riesgo.

La colocación segura del paciente es esencial para garantizar la eficacia de los procedimientos quirúrgicos.1 Todos los miembros del equipo de quirófano comparten la responsabilidad de la colocación inicial y el mantenimiento del paciente durante la operación.2,3

Para garantizar una comprensión adecuada de la colocación del paciente, todos los miembros del equipo de quirófano deben conocer los riesgos comunes, en particular los puntos de presión asociados a las distintas posiciones, y las indicaciones específicas para los pacientes bariátricos.

El decúbito supino es la posición más utilizada para los procedimientos quirúrgicos. En esta posición, el paciente se encuentra boca arriba con el brazo recogido a los lados o extendido, asegurado en los brazaletes. Las variaciones de la posición supina pueden incluir la abducción de las piernas, la extensión del cuello o la fijación craneal.

Posición supina

El posicionamiento quirúrgico es la práctica de colocar a un paciente en una posición física concreta durante la cirugía. El objetivo de la selección y el ajuste de una posición quirúrgica concreta es mantener la seguridad del paciente al tiempo que se permite el acceso a la zona quirúrgica. A menudo, el paciente debe colocarse en una posición no natural para poder acceder a la zona quirúrgica[1].

Además de las consideraciones relacionadas con la ubicación del sitio quirúrgico, la selección de una posición quirúrgica se hace después de considerar los factores físicos y fisiológicos pertinentes, como la alineación del cuerpo, la circulación, las limitaciones respiratorias y el sistema musculatorio para evitar el estrés en el paciente[1][2] Los rasgos físicos del paciente también deben ser considerados, incluyendo el tamaño, la edad, el peso, la condición física y las alergias[2] El tipo de anestesia utilizada también afecta a la decisión[2].

La presión es la fuerza ejercida sobre el cuerpo del paciente. Esas fuerzas pueden provenir de la propia cirugía, los instrumentos, los taladros, la gravedad, los accesorios y los vendajes. La duración y la intensidad de la presión están inversamente correlacionadas. Cuanto mayor sea la duración de la presión, menos presión podrá soportar el cuerpo. Sin embargo, el cuerpo puede soportar una gran cantidad de presión durante breves períodos de tiempo. La cantidad de presión sobre el tejido se basa en el tamaño del área de contacto: cuanto más pequeño sea el punto de presión, mayor será el efecto sobre el tejido. La posición de los instrumentos puede causar daños en el cuerpo si la presión no se alivia periódicamente[1].

Posiciones quirúrgicas pdf

El posicionamiento quirúrgico es la práctica de colocar a un paciente en una posición física determinada durante la cirugía. El objetivo de la selección y el ajuste de una posición quirúrgica concreta es mantener la seguridad del paciente al tiempo que se permite el acceso a la zona quirúrgica. A menudo, el paciente debe colocarse en una posición no natural para poder acceder a la zona quirúrgica[1].

Además de las consideraciones relacionadas con la ubicación del sitio quirúrgico, la selección de una posición quirúrgica se hace después de considerar los factores físicos y fisiológicos pertinentes, como la alineación del cuerpo, la circulación, las limitaciones respiratorias y el sistema musculatorio para evitar el estrés en el paciente[1][2] Los rasgos físicos del paciente también deben ser considerados, incluyendo el tamaño, la edad, el peso, la condición física y las alergias[2] El tipo de anestesia utilizada también afecta a la decisión[2].

La presión es la fuerza ejercida sobre el cuerpo del paciente. Esas fuerzas pueden provenir de la propia cirugía, los instrumentos, los taladros, la gravedad, los accesorios y los vendajes. La duración y la intensidad de la presión están inversamente correlacionadas. Cuanto mayor sea la duración de la presión, menos presión podrá soportar el cuerpo. Sin embargo, el cuerpo puede soportar una gran cantidad de presión durante breves períodos de tiempo. La cantidad de presión sobre el tejido se basa en el tamaño del área de contacto: cuanto más pequeño sea el punto de presión, mayor será el efecto sobre el tejido. La posición de los instrumentos puede causar daños en el cuerpo si la presión no se alivia periódicamente[1].

Colocación del paciente en el quirófano

POSICIONES QUIRÚRGICAS COMÚNES PARA EL QUIRÓFANOLos procedimientos quirúrgicos requieren una posición adecuada del paciente para mantenerlo cómodo y seguro durante la cirugía y proporcionar al cirujano un acceso fácil y sin obstáculos al sitio quirúrgico. Son muchos los factores que influyen en la decisión de cómo colocar a un paciente durante un procedimiento:

Posición de Fowler altaEn la posición de Fowler alta, el paciente suele estar sentado (posición de Fowler) en el extremo de la cabeza de la mesa de operaciones. La mitad superior del cuerpo del paciente está entre 60 y 90 grados en relación con la mitad inferior de su cuerpo. Las piernas del paciente pueden estar rectas o dobladas.

Posición de bisturíLa posición de bisturí, también conocida como Kraske, es similar a las posiciones de rodilla-pecho o de rodillas y se utiliza a menudo para las cirugías colorrectales. Esta posición ejerce una presión extrema sobre las rodillas. Durante el posicionamiento, el personal quirúrgico debe colocar un acolchado adicional para la zona de las rodillas.

Posición de riñónLa posición de riñón se asemeja a la posición lateral, salvo que el abdomen del paciente se coloca sobre un elevador en la mesa de operaciones que dobla el cuerpo para permitir el acceso al espacio retroperitoneal. Se coloca un soporte de riñón debajo del paciente en el lugar de la elevación.